Aunque es habitual colocar placas solares en los tejados, la energía del sol que reciben las fachadas es muy aprovechable. Y puede ser una solución óptima para no limitar el uso de terrazas accesibles, como esta instalación en Polop, comarca alicantina de la Mariana Baja.

Se trata de una instalación de autoconsumo residencial que garantiza 5,2 kwp de energía y cubre las necesidades básicas de la vivienda. La instalación de los paneles verticales también genera un aislamiento extra en la fachada más expuesta del edificio.